Las bacterias y organismos patógenos, así como los saprófitos requieren agua (humedad) para subsistir, de ahí que debe controlarse la calidad del agua a través de análisis microbiológicos, se resume a continuación información entre la enfermedad y el organismo que la causa.
La desinfección y la aeración de los almacenamientos son operaciones fundamentales así como el monitoreo de la calidad de agua en las redes de distribución. Si la desinfección se realiza empleando Cloro, se requiere 0.2 a 0.3 mg/L como valor residual en condiciones normales y hasta 0.5 mg/L de Cl2 residual en caso de epidemias.